lunes, 19 de septiembre de 2011

cultura y gastronomia de puebla

Cultura de puebla

La cultura de Puebla —estado que se localiza al oriente de la capital de México— es resultado de un largo proceso de mestizaje que inició en la época colonial y continúa hasta nuestros días. El patrimonio del estado está constituido por obras tangibles e intangibles, algunas de las cuales son consideradas Patrimonio de la Humanidad. Puebla y su cultura aparecen ligados en el contexto mexicano con su tradición gastronómica, la religiosidad de sus habitantes y las chinas poblanas. Sin embargo, Puebla también es un mosaico de culturas, donde la herencia novohispana se mezcla con los vestigios de culturas milenarias y la presencia de numerosos pueblos indígenas que modelan entre todos la identidad de los poblanos, identidad en la que están implicados sucesos históricos relevantes en la historia mexicana como la Batalla de Puebla.

Uno de los íconos más representativos del nacionalismo mexicano es la china poblana, que a pesar de ser un personaje propio de todo el centro del país, tras la confusión entre el personaje del pueblo y la China poblana histórica (Catarina de San Juan) quedó ligada en el imaginario popular mexicano a la Angelópolis. Otros aspectos que se relacionan con los poblanos son la riqueza de la gastronomía del estado, que incluye una variada gama de platillos, entre los que se encuntran los chiles en nogada y el mole poblano. Puebla es ampliamente conocida en México como el sitio donde se elabora la cerámica de talavera mexicana, que se vende a precios estratosféricos en los mercados de artesanías y fue empleada intensivamente en Puebla como elemento decorativo arquitectónico. Otro elemento importante que distingue a Puebla es la fama de la religiosidad católica de sus habitantes: uno de los mitos más comunes del estado es que en él se encuentra Cholula de Rivadavia, Se dice que Cholula tiene 365 iglesias, pero esa es una leyenda surgida en la época de la conquista, en realidad solo hay unos 45 edificios religiosos en ella.





Gastronomia de puebla
La gastronomía poblana, producto del mestizaje que devino con la Conquista de México por parte de los españoles, es una de las más representativas de la República Mexicana. Numerosos mitos están asociados a algunos de los platillos más conocidos de la gastronomía regional del estado, a la que se suele identificar en México con relación a dos platillos que se consideran platos nacionales del país: el mole poblano y los chiles en nogada. Sobre el mole, la leyenda dice que fue creación de sor Andrea de la Asunción, del convento de Santa Rosa en la ciudad de Puebla. Esta monja habría creado el platillo en ocasión de la visita del obispo a su congregación. En la leyenda, el nombre del plato se asocia con una expresión de admiración de una compañera de Andrea de la Asunción al ver a ésta moliendo los ingredientes afanosamente; aunque se sabe que el origen de la palabra mole es de origen náhuatl y que la mezcla de chiles secos o frescos en la confección de salsas era una práctica común en las gastronomías mesoamericanas precolombinas. A esta base de chiles, uno de los ingredientes básicos de la gastronomía mesoamericana, se sumaron las especias y los aceites llegados con los españoles, que dieron origen a los moles contemporáneos, cuya preparación de ninguna manera es exclusiva de Puebla, aunque el mole más conocido sea precisamente el poblano.
Con los chiles en nogada ocurrió algo similar que con el mole. Este plato no es otra cosa que un chile poblano relleno de picadillo de carne de res y frutas, bañado en salsa de nueces de Castilla (el fruto del Juglans regia) y queso de cabra y espolvoreado con granos frescos de granada y hojas de perejil. La leyenda asocia la creación de este platillo con una monja del convento de Santa Rosa, también en la ciudad de Puebla. El plato habría sido confeccionado en honor de Agustín de Iturbide, en ese tiempo, emperador de México. Sin embargo, la nogada aparece en recetarios del siglo XVIII, por lo menos un siglo antes de la independencia de México, y el chile en nogada no aparecerá en estos recetarios hasta mediados del siglo XIX, treinta años después de la abolición del Primer Imperio Mexicano.
Más allá de estos dos platos ampliamente conocidos en México y a nivel mundial, la cocina poblana es muy variada y comparte con otras gastronomías mexicanas el mestizaje de elementos indígenas, españoles y asiáticos, producto de la historia del país. Sólo en la ciudad de Puebla es posible encontrarse con gran cantidad de platillos, desde antojitos como chalupa, cemitas, tortas, tamales de diversos estilos; hasta alta cocina internacional y bebidas tan particulares como la pasita, única de la Angelópolis. En toda Puebla, la base de la comida es el maíz, el frijol y el chile, y estos tres elementos se combinan para producir una gran cantidad de platillos, como las enfrijoladas, que se consumen en cualquier localidad poblana. Además de la capital, la cocina poblana se diversifica en cada una de sus regiones, donde incorpora características particulares dependiendo de los recursos e ingredientes disponibles. Por ejemplo, está el mole de caderas de Tehuacán, que se prepara en honor del Festival de la Matanza, en que se sacrificnn los chivos de los hatos familiares. En la Mixteca, el repertorio gastronómico incorpora insectos como los cuetlas y los jumiles; cactáceas como la biznaga y la pitaya; frutos tropicales como el zapote negro; y a base de huajes se prepara el huaxmole.En el centro del estado se pueden encontrar mixiotes, barbacoa y pulqe; todos deudores del maguey; además, está la gran tradición de lácteos de Chipilo, donde los descendientes de los vénetos establecidos en la región continúan produciendo quesos al estilo de Italia.
Cabe mencionar que dentro de la Cocina Típica Poblana destacan una amplia variedad de dulces y vínos de Exquisito sabor producidos en las diferentes regiones de Puebla, entre ellos mencionamos a los Polvorones Poblanos, Camotes de diferentes sabores, Alegrías elaboradas con Amaranto y Miel de Abeja, Palanquetas de Cacahuate, Sidra producida en Huejotzingo y Vinos de diferentes sabores producidos en Zacatlan de las Manzanas y Acajete, Rompope elaborado por las Monjas de Santa Clara.


      



Fuente de informacion:http://es.wikipedia.org/wiki/Cultura_de_Puebla#Gastronom.C3.ADa

cultura y gastronomia de sonora

Cultura de sonora
 
A pesar de la escasa población indígena que actualmente se conserva en el estado, muchas de las tradiciones de los antepasados sonorenses se mantienen vivas gracias a los descendientes de las tribus originales. Tal es el caso de los guarijíos, quienes celebran dos grandes fiestas a lo largo del año, la cava-pizca, en honor al ciclo agrícola terminado y por la buena fortuna del que está por comenzar, y las tuguardas, las cuales significan el pago de los pecados de los hombres y mujeres de la comunidad.
 
Otro aspecto clave de la identidad de cada estado mexicano es la gastronomía. La cocina sonorense combina la gastronomía norteña mexicana con los exquisitos ingredientes obtenidos de las aguas del Golfo de California y de la creatividad de su gente. Visitar Sonora significa disfrutar de carne de res de la mejor calidad en el país preparada en una rica carne asada acompañada de chorizo sonorense, frijoles maneados, caldo de queso y gigantescas tortillas de harina y agua. El desayuno tradicional de machaca con huevo o en taquitos de harina sólo puede ser reemplazado por unos tamalitos de chile colorado o de elote. Durante la época de la pascua católica, la capirotada sonorense constituye un platillo obligatorio. En la costa, el atún estofado como cahuama, los camarones entomatados y la botana de pescado a la mostaza, deleitan hasta al paladar más exigente. Y de postre, las famosas coyotas de Sonora y los buñuelos acompañados de un dulce champurro.
 
Traje tipico de sonora:
Sonora no cuenta con un traje típico regional definido; se representa al estado con varios atuendos, pero los significativos son los que usan las mujeres yaquis y las seris.
 
La mujer Yaqui viste para el diario faldas y blusas holgadas de telas lisas principalmente y en colores muy vivos con adorno de encaje angosto; bajo las amplias faldas llevan refajos de manta ó percal. Usan rebozo con las puntas hacia atrás. Se trenzan el cabello y lo adornan con cintas de color y vistosas peinetas; complementan su atuendo con anillos y arracadas de oro y collares de cuentas de papelillo. También entre la mujer Yaqui es muy común el uso de huaraches de tres puntadas, aunque las jóvenes prefieren las zapatillas comerciales.
 
La vestimenta de la mujer seri -considerado trajae típico de Sonora- es uno de los mas bellos de nuestro país, quizá por ser uno de los más sencillos, caracterizándose por su armoniosa combinación de colores.
Consiste en blusa de manga larga abotonada al frente, llevando a la altura de la cintura un vuelo u olán que define la esbelta figura de las jóvenes. La falda es larga y el ruedo tiene adornos de cintas en colores contrastantes, así como en los puños y el pecho de la blusa. Llevan el cabello largo y las mayores lo cubren en ocasiones con un paliacate anudado bajo la barbilla.
















Gastronomia de sonora

De la gastronomía de Sonora hay que destacar los productos en que se basa su cocina como las carnes, y sus  famosos  cortes, el trigo, nueces, bellotas, membrillos y cítricos. Además no hay que olvidar de los excelentes pescados y mariscos prodecentes del mar como por ejemplo el pargo, sardina, jurel, camarón, el rey del marisco y almejas entre otros.
Es una cocina llena de mezcla de sabores con los que los paladares mas exigentes disfrutarán con toda seguridad. 

Los platos típicos de esta regíón están representados por la carne machaca, carne seca con huevos o tacos con este mismo ingrediente. Mochomos, carne de res o ternera frita acompañados de las indispensables tortillas de harina. Frijoles refritos, hechos con frijol pinto o peruano, manteca de puerco, chile colorado y quesos cotija, requesón y Oaxaca, sin olvidarnos de las ricas sopas como la de marisco y salsas picantes.

En Puerto Peñasco podrá saborear los exquisitos platillos de la cocina sonorense, sazonados y acompañados con ingredientes típicos de la costa, como los "camarones costa brava", enrollados con tocino y cubiertos de una salsa dulce de manzana, miel y vino tinto. También podrá saborear los tradicionales "mochomos", carne de res o ternera frita acompañados de las indispensables tortillas de harina, antes de llegar al postre, para el que se recomiendan las famosas "coyotas", pequeñas tortillas de harina preparadas con piloncillo.
Guisos con Carne El orgullo de Sonora es productor de una de las mejores carnes en el mundo, avalada por su sabor y fina textura a nivel internacional. Dicha satisfacción es reflejada en los exquisitos guisos que se ofrecen en el Estado que han hecho de la carne toda una tradición.
Tamales Los tamales son una mezcla de masa batida con grasa, rellena y condimentada a la usanza de cada región; se envuelve en hoja de maíz y cocida al vapor. Por su variedad y exquisito sabor son uno de los principales platillos utilizados en el Estado.
Caldos y Sopas Un subgénero de verdad maravilloso en la cocina sonorense se integra por sus caldos y sopas, que después de una elaborada preparación se sirven para deleite de quienes disfrutan de estos deliciosos platillos.


En Hermosillo podrá deleitarse con los mejores platillos típicos del estado de Sonora, entre los que destacan los manjares elaborados a base de productos del mar como el "caldo largo", la sopa de mariscos, el pescado zarandeado, preparado con un rico condimento y a las brasas, el robalo relleno de mariscos y la caguamanta, con carne de mantarraya, así como los tradicionales "mochomos", con carne de res o ternera frita, acompañados de tortillas de harina, y como postre, las famosas "coyotas", deliciosas tortillas de harina con piloncillo.
Durante la noche no olvide degustar los mochomos, así como la deliciosa y suave carne asada típica de Sonora, además de sus deliciosos platillos a base de mariscos provenientes de las playas de Bahía Kino y San Carlos.


COMIDA TÍPICA DE SONORA
Comparada con la gastronomía del centro del país, la sonorense no es muy abundante; aún así, la tradición ha preservado platillos extraordinarios, que logran satisfacer hasta el paladar más exigente.Muestra de ello son los siguientes platillos:

Burritos, atole y tamales de pitahaya, yumare, guaca-yaquí o puchero, guacapoponi o macha, tortillas y gorditas de harina, cortes finos de res asados, tamales de elote y gallina pinta (caldo de carne con nixtamal y frijol), Gallina pinta (cocido de maíz, fríjol y carne de res),  Menudo sonorense (maíz, panza, pata de res, chile verde, cebolla, orégano, cilantro), Caldo de queso (papas rebanadas con queso, tomate y cebolla), Tamales de garbanzo, Vitualla de garbanzos, Colache de calabacitas, Bichicoris u orejones de calabaza, Tortillas de harina, Chimichangas, Coyotas, Callo de hacha, Burritos de machaca,  Caldillo de machaca (huevos ahogados), Empanadas de ostiones estilo Guaymas (ostión y mantequilla), Camarones rellenos (tocino, jamón, mostaza, naranja), Tépari con aldilla (frijoles blancos con falda de res), Huacabaque yaqui (falda de res, cacahuazintle, fríjol, jitomate, chile ancho), Frijoles maneados (fríjol, queso chihuahua, poblano, manteca),  Machaca, Carne asada, Postres: Cusirí yaqui (calabaza, piloncillo, naranja, canela, harina, leche), Coyotas del pueblo (harina, levadura, piloncillo, manteca), Bebidas: bacanora (de maguey mezcalero), zotol (maguey).
 





fuete de informacionhttp://www.arqueomex.com/S2N3nDOSIER97.html,http://www.canalsonora.com/Cultura/traje_tipico.asp,http://www.arecetas.com/gastronomia-america-americadelnorte-mexico-sonora.html,http://www.mexicolindoyquerido.com.mx/mexico/index.php?option=com_content&task=view&id=173&Itemid=53

los inicios de la gastronomia en mexico

Historia:
La historia de la gastronomía mexicana se remonta aproximadamente 10,000 años, a la época en que se estima fue domesticado el maiz para convertirse en el cultivo que después fue la base alimentaria de las culturas mesoamericanas. Este remoto origen da a la gastronomía mexicana una carta de presentación singular en el concurso de las naciones, que ciertamente la distingue de otros acervos culinarios.
El ingrediente básico y el más importante de la gastronomía azteca fue el maiz, un cultivo que era tan importante para la sociedad azteca.Así como el trigo en Europa y el arroz en la mayoría de Asia oriental, un alimento sin el cual la comida no era comida». Se cultivaba un inestimable número de variedades, las cuales varían en color, textura, tamaño y calidad; era comido principalmente en forma de tortillas, tamales o atole, además de otros guisos. Otros alimentos comunes entre los aztecas, fueron la sal y los chiles, que eran los condimentos básicos de la cocina azteca; llegando incluso a ser sacrificio el privar la comida de estos sabores.

El agua, atole y pulque, el jugo fermentado del maguey; fueron las bebidas más comunes entre la sociedad azteca. Además diversas bebidas alcohólicas, que eran fermentadas de la miel, jugo de diversas cactáceas y frutos. La élite de la sociedad se enorgullecía de no beber pulque, una bebida de plebeyos; ya que preferían beber diversas bebidas preparadas con cacao. Esta bebida era uno de los mayores lujos disponibles; ya que fue la bebida de gobernantes, guerreros y nobles. Fue condimentada con chiles, miel y una aparentemente interminable lista de hierbas y especias.

A partir de la independencia de México, las gastronomías mexicanas fueron consolidando las características que hoy las identifican desde el siglo XIX, que han dejado su impronta en la cocina del mexicano actual. Por aquella misma época entraron al país trabajadores extranjeros que trajeron también sus propias costumbres alimenticias, que en México se reprodujeron por generaciones. Proliferaron los «cafés de chinos» en varias partes del país, especialmente en la capital y en aquellas regiones donde los orientales fueron llevados para trabajar en la construcción de ferrovías. De la cocina china, quizá el pan es el que dejó una huella mayor en la gastronomía mexicana, al grado de que persisten en muchos sitios del país los «panes chinos», una especie de mantecada con nueces y ralladura de naranja.
También durante el Porfiriato las clases altas mostraron su preferencia por las cocinas europeas. Ello trajo como consecuencia el relegamiento de la cocina mexicana más sofisticada a los ámbitos de la comida casera, pero no implicó el abandono total de costumbres antiquísimas como la ingesta de tortillas de maíz. Al concluir la Revolución mexicana, la gastronomía nacional fue ensalzada nuevamente como parte del programa nacionalista de los gobiernos emanados de esa guerra civil.
El tema de la gastronomía apareció recurrentemente en el cine de la Época de Oro (décadas de 1940 y 1950), y acompañó a otros estereotipos de lo mexicano. Años más tarde, en la década de 1980, en el campo de la literatura, el tema de la cocina popular del país fue retomado por escritores como Laura Esquivel, quien publicó la novela Como agua para chocolate. La novela, a su vez, sirvió de base para la película Como agua para chocolate (1992).
El acto de cocinar en México es considerado una de las actividades más importantes, cumple funciones sociales y rituales determinantes, tales como la instalación del altar de muertos o la fiesta de quince años en México. La profesionalización del trabajo culinario en México sigue siendo predominantemente femenino: es común ver al frente de las cocinas de restaurantes y fondas a mujeres que, al adquirir el grado de excelencia, son nombradas mayoras, denominación que en la época colonial se les daba a las jefas de las cocinas de las haciendas y que ahora sería equivalente al chef europeo.

      


 No existe un concepto único de cocina mexicana, ya que, aunque se mantienen ciertos ingredientes y tendencias comunes entre la diversidad, se establecen diferencias de región en región, y cada estado mexicano posee sus propias recetas y tradiciones culinarias. Existen ciertas obras de la gastronomía local que se han extendido por regiones más extensas o incluso a nivel nacional. Este es el caso de platillos como la cochinita pibil (yucateca), el mole poblano, el pozole (identificado con Jalisco y Guerrero), el cabrito (neoleonés) y así por el estilo, con una lista inacabable.

El Taco
Dicho elemento, fundamental en la comida Mexicana, se trata de la manera perfecta de presentar los alimentos: El guiso, envuelto en una tortilla, ya sea de maíz o de trigo, posee infinitas ventajas, ya que, además de ser práctico, sencillo y fácil de preparar, es uno de los platillos predilectos debido a su excelente sabor.

El taco tiene un grado extremo de popularidad, al grado que su venta ha adquirido una fama de redituabilidad legendaria, y se realiza en cualquier situación, lugar y hora, teniendo toda clase de diversificaciones y niveles.
En México, el origen de la gastronomía merece ser investigado ya que la riqueza alimentaria de los pueblos que habitaron este territorio es un fuerte motivo. Durante la época colonial a los alimentos indígenas se unieron los alimentos y técnicas culinarias traídos por los conquistadores como aceites, alcoholes y especias, así como los alimentos de origen vacuno, caprino, porcino y de aves como la gallina de Castilla, que enriquecieron la numerosa variedad de alimentos.

  Por así decirlo, esta influencia ha derivado el comercio con gastronomías de diferentes países como la francesa y alemana principalmente que a su vez trajeron nuevos frutos y otras especias, así como nuevas técnicas culinarias.

        

Mucho deben las gastronomías mexicanas a la llegada de los españoles. Si bien la Conquista es un período que aún causa ampolla en el orgullo de muchos mexicanos, es necesario decir que buena parte de lo que come un mexicano en la actualidad tomó su forma a partir de ese encuentro entre dos civilizaciones mutuamente desconocidas. Contrario a lo que pasó en otros aspectos de la vida, en los dominios sibarios la tradición europea no desplazó a las nativas. Muy por el contrario, se unió con ellas, se mezcló y dio como resultado la base de una rica herencia gastronómica. Este encuentro tuvo sus implicaciones en ambos lados del Atlántico, en la península, y todavía más allá, donde el cápsicum americano –luego de un largo rodeo– se convirtió en paprika, y el jitomate, en manzana de oro o manzana del amor.

Además del cerdo, la vaca (y todos sus derivados), las ovejas y todos los animales que se incorporaron al que se considera repertorio gastronómico mexicano en la época de la Conquista; con los españoles llegaron cereales –como el arroz y el trigo–, frutos –especialmente cítricos, pero también pomáceos, prunáceos, rosáceos… y hasta la sandía, que los mexicanos consideran de buena fe ser nativos–; y desde luego, las especias, mítico motivo de los afanes de Colón. Ni qué decir de productos básicos como el pan, que en México se multiplicó en cientos de formas, algunas de las cuales son identificadas con sus localidades de origen (el pan grande de Acámbaro, el pan de yema de Oaxaca) y otros más con las fechas en que son preparados (como la rosca de Reyes o el pan de muerto).

htm,http://www.losmejoresdestinos.com/mexico_gastronomia.htm,http://www.buenastareas.com/ensayos/Historia-De-La-Cocina-Gastronomia/1735859.html,http://www.monterrey-mexico.com.mx/blog/gastronomia-de-mexico-un-poco-de-historia-parte2.htm

fuete de informacion:http://es.wikipedia.org/wiki/Gastronom%C3%ADa_azteca,http://es.wikipedia.org/wiki/Gastronom%C3%ADa_de_M%C3%A9xico#Historia,http://www.losmejoresdestinos.com/mexico_gastronomia,

aspiraciones de la carrera de gastronomia

Esta carrera para  mi es un paso para  mi futuro y espero que en esta institucion me puedan ayudar a alcanzar los sueños que tengo planeados tanto para mi como para mi familia y espero estar a la altura tanto de la carrera como de la institucion y no defraudar a todos aquellos que tienen esperanza en mi.